La alerta amarilla de la Agencia Estatal de Meteorología se ha traducido esta noche en unas lluvias torrenciales que no han pasado desapercibidas para nadie. Esta mañana la acumulación de piedras y barro en la CO-6211, en Doña Mencía, ha dificultado la circulación de muchos vehículos; muchas calles han amanecido anegadas de barro y hay quién apenas ha dormido sacando agua de sus patios y sótanos. Se han caido muros de algunas casas e incluso ha entrado agua en naves del polígono. También hay goteras en edificios públicos como el consultorio médico.Además, los vecinos de la Avd. de la Constitución, donde el corrimiento de tierras continúa presionando el muro de contención, permanecen pendientes de los movimientos del terreno. Tal y como ha informado el arquitecto-técnico municipal, Jesús Caballero, ayer visitaron la zona aledaña a la ladera de
Buenavista un geólogo y un estructurista que han asegurado que de momento, la estructura de las casas no peligra. El problema permanece en los muros de contención, ya que están aguantando todo el terreno que se ha cedido. Los especialistas deben ahora elaborar un informe en el que se contemplen todas las observaciones y se definan las actuaciones a desarrollar. Desde el consistorio se ha informado también de que no se pueden acometer actuaciones profundas mientras permanezcan las lluvias. Lo que sí se quiere hacer es desviar la carga de agua que recibe el muro afectado.En cuanto a las casas de la zona, destacar que aunque en un primer instante se recomendó a la familia de una de ellas desalojarla, sus dueños continúan en la vivienda ya que ese consejo fue sólo por extremar la tranquilidad de sus inquilinos y no porque existiera ningún problema en la estructura del inmueble. No obstante, permanecen pendientes de las fisuras y ruidos que notan, para que en caso de que sea necesario, vuelvan a llamar a los especialistas para que se lleven a cabo medidas de urgencia.
Una de las primeras consecuencias de la continuas precipitaciones en la localidad fue el hundimiento del colector que pasa a un lado del parque. Hoy martes podemos observar como el socavón ha aumentado de tamaño, y es que ya han comenzado los trabajos para su reparación. Según ha informado el arquitecto-técnico municipal se quiere eliminar la parte de colector que está en mal estado para evitar nuevos hundimientos. Para ello está siendo necesario que los operarios amplíen la zanga abierta hacia abajo, en dirección al parque infantil. “De momento, habrá que ampliar la zanja aproximadamente la
misma longitud que tenía hasta ahora abierta”, comentaba Jesús Caballero. Una apertura que previsiblemente crecerá aún más cuando la Agencia Andaluza del Agua decida que trabajos desarrollar en su totalidad.
