Álvaro Rodríguez habló en su intervención de "Situaciones conflictivas y psicoeducación para el cuidador", aconsejando a los cuidadores que no se guarden los problemas para ellos mismos, sino que compartan experiencias con otras personas en la misma situación. Igualmente, recomendó seguir rutinas en los momentos de bañar, vestir, dar de comer o dormir del paciente, evitando discusiones, críticas e intentando que el enfermo siempre viva en la misma casa.
Por su parte, Don Ricardo Rodríguez apostó por una buena historia clínica, compatibilizada con los test habituales y con un buen contacto médico-paciente para posibilitar un diagnóstico lo más precoz posible. Entre los síntomas del alzheimer destacó la pérdida de memoria, el transtorno en el lenguaje, la dificultad para coordinar movimientos y la desorientación en tiempo y espacio. Comentó también que actualmente no hay ningún medicamento que cure el Alzheimer, aunque sí que hay tratamientos que retrasan el deterioro del paciente y mejoran su calidad de vida. A su vez, en su ponencia informó sobre el testamento vital, una fórmula legal que permite al paciente dejar claro hasta donde quiere que llegue la atención médica en caso de que en un futuro pierda las facultades para decidir.