El salón de actos de la Casa de la Cultura Juan Valera acogió en la noche del sábado la celebración del III Pregón del Costalero, un evento organizado por la Cofradía de Ntro. Padre Jesús Cautivo y Ntra. Sra. De la Estrella de Doña Mencía. La presentación corrió a cargo de Alfonso Tudela Polo y el reconocimiento estuvo dedicado a Antonio Martínez Fernández Pacheco, por su dedicación a la Semana Santa y especialmente, por sus 30 años como capataz del Santo Sepulcro. Fue un evento, que además contó con el acompañamiento de la Agrupación Musical “Nuestra Señora de los Dolores” de Carcabuey.
De Antonio Tudela destaca su vinculación como costalero y capataz de la Cofradía de Ntra. Sra. de los Dolores, así como costalero con la Cofradía de Jesús Cautivo y Ntra. Sra. de la Estrella. Entre sus palabras durante la presentación, destacaron las referentes a sus experiencia llevando estas imágenes. “Estás en la trabajadera, pesa el aire encerrado como el plomo, arco cansado es ya cada costilla, el paso cae sobre el cuello, las horas marcan el devenir incesante del dolor y la fatiga, cirineos sufridos, ardor juvenil, se escapa un suspiro, un quejido se eleva al cielo de la noche menciana, flexionas las piernas, que tiemblan levemente mientras dibujas postura y movimiento, metes riñones, en espera de ese grito que enardece el espíritu y estimula el esfuerzo: ¡Esta es! Truena el llamador, y sólo quieres elevar a la reina a ese cielo donde muere y desde el que nos protege. Comienzas a andar, suena el son que acompaña tu caminar, y mientras sufres ofreces tu esfuerzo a la que se mece arriba”, relató en referiencia a la Virgen de la Estrella.
Por su parte, el homenajeado Antonio Martínez, instó con sus palabras a que se potencien actitudes de colaboración entre cofradías y recordó la primera vez que guió al Sepulcro auspiciado por los consejos de Francisco Cubero. Comentó que el capataz, debe ser para los costaleros como un padre, y que no solo tiene que tener voz de orden y de mando, sino que también tiene que preocuparse por los suyos, por lo que están debajo. Resaltando a la vez, que un capataz nunca lo sabe todo y cada año aprende algo nuevo.
De Antonio Tudela destaca su vinculación como costalero y capataz de la Cofradía de Ntra. Sra. de los
Por su parte, el homenajeado Antonio Martínez, instó con sus palabras a que se potencien actitudes de colaboración entre cofradías y recordó la primera vez que guió al Sepulcro auspiciado por los consejos de Francisco Cubero. Comentó que el capataz, debe ser para los costaleros como un padre, y que no solo tiene que tener voz de orden y de mando, sino que también tiene que preocuparse por los suyos, por lo que están debajo. Resaltando a la vez, que un capataz nunca lo sabe todo y cada año aprende algo nuevo.